Cuarenta

Nací el 5 de febrero de 1974. Hace 40 años.

Pero antes de seguir, meto una pausa para una aclaración importante: no es un post para que lean, ni para que googleen y lleguen acá encontrando algo.

Es un repaso mio de lo que hice en todo este tiempito. Es un ejercicio personal, por lo que no esperen info para tomar o algo para entretenerse. Es un relato desordenado de varias cosas.

Hechas las aclaraciones, sigo.

Nací en el policlínico bancario, frente a Plaza Irlanda. Hijo de un psiquiatra, Anibal,  y de una supervisora de la ese entonces Secretaría de turismo de la Nación, Elena. Fui el primer hijo de cuatro.

4.050 el peso. Cabezón. Cesárea.

Viví mis primeros años en Belgrano “R”. Conesa y Mendoza. Primer piso por escalera. Año y medio después de que yo llegué, nació Carolina. Hoy pediatra en Bariloche.

Cuando nació ella, Elena dejó de laburar.

Antes de mis 3 años nos mudamos a Flores. Curapaligüe 441. Piso 21. Hice el jardín de infantes en el Misericordia, Lautaro y Directorio.

Primero y segundo grado Marianista de Caballito. Éramos 45 por aula. Yo era el 43 de la lista. No existía.

En el 80 nace Cecilia, mi segunda hermana. Hoy trabaja conmigo, es Community manager y además lleva los números para el contador.

Ese año nos mudamos a Parque Chacabuco. Malvinas y Primera Junta

Tercer grado paso a un colegio municipal, mi viejo se había cansado del otro. Mi vieja se horrorizó por el cambio. El tiempo la calmó. Era la Escuela “Número 1, Distrito escolar 8vo”. La escuela Chacabuco, sobre Av del Trabajo, hoy Eva Perón. En el Parque Chacabuco. Tres cuadras de casa.

El 2 de abril de 1982 mi vieja me despertó a los gritos. Yo no sabía de que hablaba. Estaba en tercer grado. Nunca me voy a olvidar de ese día. Algún día iré a las islas. Necesito ir.

No recuerdo si antes o después de eso (tenía 8 años) muere mi abuelo paterno. Armando. Un cordobés de Bell Ville. Hijo de un italiano y de una francesa. Un laburante. Había sido repostero y también reparador de máquinas de escribir. Yo lo quería mucho. Con el tiempo lo admiré mucho por su pasión por laburar.

Su esposa, mi abuela, era hija de catalanes.

Por el lado de mi vieja hay muchos irlandeses y algunos vascos. O SEA TODOS TERRORISTAS!

En fin… soy una mezcla de tanos, franceses, catalanes, vascos e irlandeses. Uff.

En mi primaria me gustaba cuando llovía porque Magdalena en la radio ponía Cantando bajo la lluvia. Siempre amé esa melodía.

En el 84 nació Leticia. Mi tercera hermana. También labura conmigo, es community manager, planificadora de publicidades y es la que chequea todas las avants de cinesargentinos.

Recuerdo haber viajado a Bariloche un año en LADE. Volar me ponía ansioso. Vomité en todos los tramos. Y el vuelo tuvo 3 escalas. Un F28

La secundaria la hice en el Comercial 19 de Caballito, Formosa y Senillosa. Fue la primera promoción mixta del colegio. Antes era solo de mujeres. O sea… en el colegio cuando entré había solo 20 varones. Y estimo que 600 mujeres. ¿Suena lindo? Creo que fue traumático.

Con el tiempo lo superé.

Además de mis 3 hermanas, tengo 9 primas. Bendito tu eres lo escuché toda la vida. Bendito en que, no se.

La secundaria no es un lindo recuerdo. No por algo en particular. A la distancia me parece un periodo choto. No se bien por qué. No por mis compañeros a los que adoro, tampoco por las profesoras, que me enseñaron mucho. Que se yo. Es un trámite burocrático de mierda. No se si sirve. O quizás fue eso que tuvo que pasar.

En el medio mis viejos se divorciaron. Fue heavy.

Yo laburé en una heladería del barrio, luego fui cadete en una agencia de viajes. Para tener algo de plata y no sacarle a mi vieja. Eran momentos complicados.  Todo mientras hacía el colegio.

Me fui de viaje de egresados por Chevallier. Me lo pagué yo. Odio los viajes de egresados. Odio como mienten en la venta, odio que da lo mismo que sea en cualquier lugar, porque de Bariloche… no ves nada.

Terminé el secundado, arranqué el CBC. Me cansó. Quedé colgado con una materia, ni me acuerdo cual.

Entro a laburar en Errol´s “la primera cadena de video” de la Argentina. Era chilena. Entro como “recomendador de películas” en la sucursal de Juan B Justo, Villa Crespo. A los dos meses me ascienden a jefe de local, en el que estaba en Callao y Las Heras. Estuve 5 meses, presencié dos suicidios, mujeres que se tiraban de cabeza. Me prometí nunca vivir en Recoleta.

Me trasladan a la sucursal de Asamblea y Jose M Moreno. Me quedaba cerca de casa. Ganaba $ 600. No laburaba los domingos.

Me fui de la UBA y me anoté en  la UADE. Primer año bien… para comercio internacional.

El segundo año me dispersaba mucho mentalmente, me aburría. La mayoría de mis compañeros no laburaba. Estaban en otra. Con el tiempo me di cuenta que fue un error ir al turno mañana… pero era el que me quedaba bien para mi laburo que era de “tarde noche”. Pero también para los que no laburan en nada…

En una materia tenía de compañera a Zulemita.

Si esa. En ese momento era la “primera dama”

Los custodios estaban abajo en una o dos camionetas. Recuerdo cuando una vez dijo “en el próximo viaje con el papi, me traeré unos micrófonos y auriculares para que me dicten desde el auto”.

#elpapi

La decana o no se quien de buen cargo,  era profesora de una materia que compartía con ella. La mina se derretía por tenerla a ella. Cualquiera.

El 5 de febrero de 1995 cumplí 21 años. Ese día renuncié a Errol´s. Había ahorrado año y medio. Había soñado con mi primer viaje durante todo ese tiempo. Lo planifiqué con mi prima Irene.

El 6 de febrero nos fuimos los dos por VASP vía San Pablo a Bruselas, de ahí por British Midland a Londres.

Odiaba a los ingleses, viajé con camiseta de fútbol. Bien argento. Su cultura y su respeto fueron un sopapo y los amé. Pero me di cuenta cuando terminé el viaje.

Recorrimos durante un mes y medio Londres, París, Madrid, Barcelona, Berna, Interlaken, Innsbruck, Salzburgo, Rottenburg, Nuremberg, Copenhague y Amsterdam. Una lección de historia, de geografía, de vida.

Irene se ocupaba de los idiomas (habla inglés, francés y alemán). Yo era el contador y el que armó todo el cronograma de viaje y los destinos. Volvímos y nos prometimos no vernos por un tiempo. No nos soportábamos más. Duró poco. A la distancia nos reimos. La quiero mucho. Es abogada. Fui su testigo de casamiento.

Volví al país. No tenía trabajo. El padre de Zulemita ganó la re elección. No había trabajo en general. Estuve 7 meses sin poder laburar. Engordé, me deprimí.

Empecé terapia.

Conseguí laburo en Sam´s club. La división mayorista de WalMart que recién llegaba al país. Abrí el local de Constituyentes. Entré por la UADE. Era cajero.

En el medio de la capacitación abre el primer WalMart, el de Avellaneda. Fui de apoyo. Laburé 24hs seguidas. Era un descontrol. Las donas eran ricas. Yo repuse en la medianoche la góndola de yerba mate. Que manera de comprar cosas la gente. Había una leyenda que decía que los primeros changos los habían regalado. Como le gusta a la gente desparramar esas boludeces.

Sigo con terapia. El loco me decía que estudiar no me hacía feliz. Estaba en pedo le dije ¿Como no iba  a estudiar??. Lo dejé a él.

A los dos meses me cae la ficha. Tenía razón.

Abandono la UADE, me voy a estudiar para piloto. Todas las semanas viajo desde Parque Chacabuco hasta Don Torcuato. Aprendí en AERODOT. Hoy no existe ni el aeropuerto, ni la escuela. Arranqué con un PA 11 modelo 1948. Me recibí con un Cessna 152. El PA11 lo rompió otro alumno. Una cagada.

En el PA 11 LV-YLD hice mi primer vuelo solo.  Mi instructor Eduardo me hizo aterrizar en una pista de lo que hoy es Nordelta. Me tocó el hombro y me dijo “pegate una vuelta solo”. Mi pierna derecha empezó a temblar. Lo logré. Pero fue el peor aterrizaje de mi vida. Eduardo me felicitó.

“Torcuato, acá el Yankee Lima Delta”. Volaba a 90km por hora. Lo apurabas y llegabas a 120km por hora. Lloro.

Conseguí la licencia de piloto y no tenía licencia para manejar autos. El día de la inspección estaba muy nervioso. El inspector de la Fuerza aérea era un pelotudo que tenía miedo a volar (eso decían). En el examen me pide que haga una “aproximación a la pérdida”. Yo tiré una perdida directo.  No sabía lo que era la “aproximación a la perdida”

El tipo me insultó. Le dio miedo. Aterricé en mi segundo peor aterrizaje. Me quedé alto e hice un deslizamiento. El tipo temblaba. Me dio la licencia, creo que para no tener que tomarme nuevamente el examen.

Seguí volando. Pasé las 120 horas registradas. Amaba volar. Es una sensación maravillosa. Cumplir un checklist, llenar el tanque, “aire caliente al motor”, chequear la meteorología.  Fui a Miramar, Pergamino, Zarate, la Isla Martín García! Volé en San Justo, en Trenque Lauquen. Algún día volveré a volar. Lo deseo. Es caro, pero la religión del avión me llama.

En mis últimos meses en Sam´s el gerente me había pasado a electrodomésticos. Levanté mucho las ventas. Era un apasionado de mi sector, de vender enseñando a la gente las nuevas tecnologías y sus ventajas.

Me pagaban poco. De Sam´s Club me fui. Me llevé a una gran amiga, Cielo. Hoy vive en París, se casó con un francés y tiene tres francesitos.

Entré en Easy, de Cencosud. Me ofrecían ser encargado de Bazar y Electro de un local nuevo en Quilmes. Creo que era el quinto o sexto de la compañía. Me pagaban el doble que en Sam´s. El entrenamiento lo hice en Lomas de Zamora unos meses.

Abrimos Quilmes. Entraba a las 6 de mañana. Salía a las 4 de mi casa, me tomaba el colectivo 4 y a las 4:30 tomaba el 129 “el rio de la plata”. En el medio caminaba las calles de Constitución llenas de prostitutas, borrachos y gente de la noche. Yo iba dormido.

En el 129 me ponía el despertador. Una vez me pasé. Pero llegué a Club XXI ¿Se llama así aun?

Llegó un alemán a cambiar muchos locales de la empresa. Era un rígido pero le caí bien. Me asciende y me lleva al mejor local en ventas: Palermo. Era un quilombo. Como vendía!

Me tocó un jefe pelotudo que me empezó a cuestionar los francos. Laburaba 2 días a las 6 de la mañana y 4 a las 4 de la tarde hasta el cierre. O al revés. No me acuerdo.

Cuando me empezó a decir “¿Qué, te tomás el franco?” empecé a buscar otro laburo.

Empezaban a aparecer los multicines. Quería laburar en uno. En Showcase me toman para abrir Norte. Me capacitan en Haedo. Soy “Asistente de gerente”. Se demora Norte. Trabajo año y medio en Haedo, incluyendo dos vacaciones de invierno.

Empiezo a hacer una web de cine y viajes. Mis jefes se reian. “che, vos te cortás el pelo por internet también jo jo jo?”

En Haedo batimos dos veces el récord de espectadores de un cine en un solo día. En el 99 fueron 25.525 personas en el segundo miércoles de las vacaciones. Esa cifra es imbatible. Godzilla, Manuelita, Dragonball… y mucha gente

Aprendí a proyectar películas, conocí a la industria. Conocí a los espectadores.

Esa web personal se transforma en cinesargentinos.com. Me olvidé de escribir de viajes. Aunque igual me fui con Cielo a Europa, también a Sudáfrica. Eramos amigos de viajes.

Abrimos Norte. 16 salas. Me ascienden a gerente. Estaba a cargo de las boleterías. Fueron muchos años. Muchos.

SI, AHI APRENDI TODO DE LA INDUSTRIA DE CINE. Fue una pasantía para cinesargentinos.com… que duró muchos años.

Años en los cuales cerraba el cine a las 4 de la mañana de un domingo, y llegaba a mi casa y me ponía a hacer cinesargentinos.com. A la distancia parece una locura. Pero sin hijas era más simple :)

Cuando estaba en el cine me llama un amigo que había conocido en Easy. El laburaba en Goldstar, que luego pasó a llamarse LG. Me quería llevar a trabajar a una empresa de internet que recién empezaba. Eran de 10 a 15 locos que laburaban en dos estacionamientos del edificio que está al lado de la Philips. Me gustaba el proyecto, pero me daba cuenta que estaría muchas horas por día… y yo le tenía fe a mi proyecto personal. Hoy no me arrepiento a haberle dicho no a Mercadolibre.com

Ese amigo se llama Nicolas Berman. Luego me dio una de las charlas más útiles de mi vida: El ABC del SEO. También fui de los primeros en su programa de afiliados. Conocí a Marcos Galperín, fana de cinesargentinos. Un groso.

Cinesargentinos fue creciendo. Me había puesto un apodo, usé el que tenía en el ICQ “Chandler”. No podían saber que laburaba en un cine. Los del cine mayormente no podían saber que tenía una web de cine. Los lectores tampoco sabían de que laburaba en un cine. Es la primera vez que lo cuento con esto, aunque muchos ya lo sabían.

El “Chandler” era por Friends, claro. Pero en el ICQ veo que hay varios, entonces le agrego el “Sir”. Si, por mi admiración a los británicos.

Conozco a Flavia. Era cajera. Yo su jefe. Empezamos a salir. Empieza la convivencia, le saco cualquier ventaja posible a ella laboralmente, era la que menos horas hacía, la que menos cobraba… nadie se podía dar cuenta. Solo los amigos lo sabían. Pero igual dos años después una empleada me “denuncia”, me trasladan a Belgrano. Ella aguanta un tiempo, luego renuncia.

Yo vuelvo a Norte. Vivíamos en Olivos. Cerca del cine. En el medio voy de apoyo para abrir Showcase Rosario. Que lindo es Rosario.

Me había comprado un Peugeot 206 en el 2001 0km. Dos años después yendo a jugar al TEG a la casa de un amigo, Emilio en Haedo, me cruzan con un auto y dos tipos bajan a punta de pistola. “Dame el oro, dame el oro hijo de puta” me decían, tenía un caño en la  cabeza. Yo no resistí. Les dije que se llevaran todo. Justo Flavia se había bajado a tocar el timbre. Menos mal. Siempre bajaba yo.

Para mi me los mandó Emilio para que no le gane de nuevo. Es el gerente de Showcase Haedo y padrino de mi segunda hija.

El auto apareció en un villa dos días después. Estaba chocado y con balas servidas adentro. Habían afanado otros autos desde el mio.

No soporté eso, lo vendí. Me quedé sin auto. Estaba corto de plata y me venía bien.

El tiempo pasa y mejora la economía personal, me dan un préstamo hipotecario. Logro comprar un departamento. Nos mudamos a Flores. Camacua y Alberdi. Me parecía bien que nos casemos entonces. No era excluyente para buscar “descendencia”, pero me parecía mejor.

5 años después de nuestro primer beso, nos casamos. Un miércoles caía ese “aniversario”, y se tenía que respetar. Odio las fiestas. Planifico un simple encuentro en un restaurant con amigos y familiares. La plata la destino a la luna de miel.

Ella quería casarse por iglesia. Ok… entonces elijo la Santa Cruz. No solo por irlandesa, fundamentalmente por su historia más jugada que las del resto. El cura un copado. Igual mucho no me acuerdo. Estaba medio sedado.

Nos fuimos 10 días a Europa (no alcanzaba para mas). El pasaje a París costó USD 799 por TAM. Hicimos además Londres y Roma.

Unos meses después quedamos embarazados. Amélie se llamaría. Nos dijeron de todo cuando anunciamos el nombre.

Nació en enero del 2007. Esa mañana me estaba peleando con varios en el cine, estaba puteando a varios. Era jodido en el cine. Rígido con muchas cosas. En el medio de las puteadas me llama Flavia y me dice que está yendo a internarse, justo en el único día que no la puedo acompañar al médico en todo el embarazo “era el día”. Me puse a llorar, llegaba el día. Comenzaba a caer la ficha.

Me fui en remis con mi uniforme del cine al Otamendi.

Presencié el parto. “Vení a ver que ya sale” me dijo Cogorno… el médico. Yo le dije “dejá dejá, que quiero seguir enamorado”. Salió Amélie. La llevé a los controles y pinchazos que les dan ni bien salen. No podés creer que seas parte de haber hecho eso.

Unos meses antes había conocido a Tomás Yankelevich. Hoy programador de Telefé. Tenía un proyecto de hacer una web de cine para vender entradas. Me sumo como asesor. En Showcase me pasan como gerente general del Imax. Arranco con la película 300. Pero ya tenía fecha de vencimiento que yo me había puesto. Justo una semana antes del estreno de una Harry Potter en el Imax…

Fueron 8 años y 11 meses de convivir entre pochoclos, programación de películas, gente que salía por todos lados, cierres hasta las 4 o 5 de la mañana, conteos de bolsas de pochoclo o vasos si los números no cuadraban, preparar los depositos para Juncadella, entrevisté a cientos de personas, saqué gente molesta de las salas, cientos de sábados a la noche clavado en el medio del cine para ver que todo funcionara… y si había una queja me la fumaba yo. Cuantos años ahí adentro.

Pero los recuerdo con cariño. Y renuncié

A Showcase le debo mucho. Amigos, experiencia y a mi compañera.

A Amélie le decimos que ella nació en el cine. No entiende. No importa.

Me voy a laburar con Tomás. Estaba en las oficinas de Cris Morena. También seguía con Cinesargentinos.com obvio. Laburando fuera del cine después de mucho tiempo, me doy cuenta de que si le dedico más tiempo a lo mio, puedo crecer. Era un riesgo muy grande con una beba recién nacida. Cinesargentinos ya daba sus propios ingresos hace rato.

El proyecto de Tomás que se llamaba Tktbox se pincha un poco, porque Hoyts se vende y no quiere participar. Veo un futuro complicado y entonces informo que me voy. Sigo laburando con ellos tercerizado. Tomás es un gran tipo. Aprendí mucho. A los meses dejé de hacer eso porque se abandona el proyecto. Desde entonces no lo veo.

Y empiezo a laburar de lleno en Cinesargentinos.com. No lo puedo creer. Mucho miedo. Mucho. Pero la cosa empieza a crecer. Se suma mi hermana Leticia que vuelve de un año en Londres donde trabajó.

200.000, 300.000 visitas por mes. La web empieza a crecer. Y decido que es hora de profesionalizarla. Llamo a Digbang que era la empresa que había hecho tktbox.com y hacía la web de Cinemark. Gente que hablaba el mismo idioma que yo.

Me pasan un presupuesto para hacer la web que hoy se conoce. Era más caro que un 0 kilómetro. Uff… ¿Y ahora?

Voy a Hoyts. Estaba Pablo Lundahl, ex Village, a cargo de la empresa que había sido comprada por un fondo común de inversión. También Laura Najlis que había entrado en marketing con los nuevos dueños. Le digo que necesito esa plata, para ver si había alguna posibilidad.

Laura me dice que en una semana me contesta. Me proponen comprarme un año de publicidad por adelantado y la exclusividad en la venta online. Suena lógico. Acepto.

Arranca el desarrollo de la nueva web. Lo loco es que a los meses de lanzada Lundahl me llama para romper la exclusividad. O sea él me dice que levanta la restricción a otros cines para promover la venta online. Y entra Showcase, mi vieja empresa. Pablo decía que él necesitaba que la gente aprendiera a comprar online, y que lógicamente comprarían en su empresa…. UN GENIO. Esa gente que ve más allá, es poca.

La “vieja” cinesargentinos era en realidad una segunda versión. La primera la había hecho yo con el Front Page.

Un día me contacta un lector, me dice que me regala un diseño. ¿A cambio de que le digo? No nada, te lo regalo, me gustaría colaborar.

Se llama Germán Saez.

Él le da el color azul y naranja a la web, con el que vivió tantos años. Germán era el fotógrafo de Soda Stereo y de Cerati. Es un artista de la puta madre. Yo tengo un agradecimiento eterno con él. Algún día podré pagar.

El sitio era HTML simple, yo subía todo manualmente.

Con el tiempo fue sumándose mucho laburo y eso limitaba su posicionamiento. Era una web artesanal.

Cuando Digbang la agarra construye una gran base de datos. El sitio hoy es eso. Tiene un gran panel atrás.

Digbang hizo la web que yo les pedí, muy personalizado. Hicieron un trabajo de la hostia. Leo Kristal fue el Team Leader. Mariano Wechsler uno de los dueños, conoció la web porque la esposa se la recomendó. La realidad es que me cobraron menos de lo que le cobrarían a otro. Bueno, eso es lo que me dijeron :)

Pero ellos querían laburar conmigo. Yo quería laburar con ellos. Los quiero.

Cinesargentinos sigue creciendo día a día. No paro de sorprenderme. Vivo de la misma.

En el julio del 2009 Mariana Mutri, encargada de prensa de Warner me ofrece viajar a Hollywood a entrevistar a lo actores y director de La huérfana. Fue un hito de la web. Mariana fue una avanzada. Ella empezó en Warner cuando yo empecé con Cinesargentinos “en el siglo pasado”. Fue una gran experiencia.

Con ese viaje decido hacer un blog… para contar cosas que en cinesargentinos.com no entraban. Quería hablar de aviones, de internet, me daba un poco de miedo hablar de viajes, pero bueno… ese era para contar.

Así nació este blog.

Unos meses después viajé a Nueva York y entrevisté a Bruce Willis. La película era chota y nunca se estrenó. Bruce un profesional. Le di la mano a Bruce Willis. Puff.

En noviembre del 2010 viajé a Londres, a la alfombra roja de la ante última de Harry Potter. Que alegría poder estar ahí.

Unas semanas antes de eso en Estados Unidos se había re estrenado una película de 1985. Yo empiezo a romper las bolas para que lo hagan acá.

No podía entender como no la traían. Me decían que no era rentable.
Para ese entonces sumo a Flavia. Ya somos tres trabajando en cinesargentinos.com

Cuando inauguran Cinemark Tortugas vuelvo a la carga sobre el director de UIP me dice “si vos estás tan seguro de que va a vender entradas, comprala”.

Ahí estaba Pablo Lundahl de Hoyts. Le pregunto si es una locura. Él me dice “si vos decís que va a vender, contá con nosotros”. También Mariela Mosso de Showcase. También me dice que me da salas.

Y dije que si. En dos meses tuve que hacerme distribuidor, llamar a todos los cines, anotarme en el INCAA. Hacer trámites, correr por el país y todo el conurbano.

Necesitaba 5.000 personas para recuperar la inversión. Me gustaba el desafío. Y si me salía mal vendía el auto, como ya lo había hecho en otra ocasión. No era problema.

Y lo dije en una radio o en un diario. Les encantó. Los periodistas me llamaban por eso. Terminé en Telenoche.

A algunos les encantaba la idea del re estreno, como a los chicos de TN Tecno que me dieron una mano terrible. Para otros era el loquito que podía perder el auto.

Fue gracioso. Todo sirvió, obvio.

Hablé en muchas radios, salí en notas de los diarios. Disney se borró de anunciante de cinesargentinos porque yo me quejé de la presión que hacían a los cines para que no tocaran su Enredados que andaba bárbaro. Cosas del mercado. Ellos estaban de ese lado, y yo estaba del otro.

Antes del estreno algunos me decían que me estaba suicidando. La pasé mal. Muy mal.

Perdí 10 kilos.

Pero el auto no.

Había decidido ir todos los días a un cine distinto para ver a los locos que iban a ver esa película que yo amé a mis 11 años, y que ahora tenía el honor de re estrenar.

Para ellos había hecho 7.000 u 8.000 posters. Era un regalo que nadie hacía y que me servía a mi para tentar a los indecisos y que me ayudaran a recuperar la inversión. Gasté unos 10.000 pesos solo en posters. Hoy sería el triple seguro.

Esa primera noche en el Showcase Belgrano muchos se sacaron fotos conmigo, me daban las gracias y me abrazaban.

Me agarró miedo escénico. No pisé más un cine. Me daba vergüenza. Yo sólo había jugado un poco aplicando conocimientos de varios años en la industria y apostando a las nuevas tecnologías.

Yo necesitaba 5.000 personas en una semana. El primer día fueron 4.700 personas si mal no recuerdo.

A las 5 semanas llegó casi a las 60.000 personas. La película sólo se proyectó de noche, en horarios ridículos siempre.

Gané plata. Pero más gané en experiencia y respeto. Eso me abrió la puerta a la etapa más fuerte de la web. Y el crecimiento paralelo en redes sociales.

Ese año viajé mucho. Me di algunos gustos. Invertí el dinero en mejoras para cinesargentinos.com. Pagué muchos impuestos. Pagué mucho a UIP. La gasté toda. Bien, pero la gasté. Era un extra.

Cuando terminó la corrida el gerente general de UIP me invitó a almorzar al Alvear. Nunca había ido. Me dijo “te invito con lo que vos me vas a pagar”. Y tenía razón. Arrancó la charla diciendo “yo de vos aprendí mucho”.

Él podría haberme mandado a pasear. Pero me dio esa oportunidad. Le agradeceré toda la vida.

Luego otros vieron la veta y yo me dediqué a la “cocina” de muchos re estrenos. Armé muchas campañas de películas exitosas.

Me fui retirando de las críticas. Hugo Zapata, un colaborador de años en la web y amigo, se ocupó más. Yo sigo viendo películas pero más como espectador. Tengo que volver a subir críticas.

Cinesargentinos hoy tiene varios anunciantes. Y una línea clara de contenido e independiencia total. Defiendo mucho lo que hago y discuto mucho con varios. Quizás ahora no tanto, porque ya la mayoría de los de la industria entendió que no es un medio tradicional.

Antes algún anunciante me llamaba para putear si una nota no le gustaba “pero tenemos una relación” me decía. Y esa era mi respuesta: como tenemos una relación no me llames para boludeces.

Cinesargentinos.com seguirá existiendo mucho más allá de la permanencia en algún puesto de quien decida poner publicidad del otro lado. Mi negocio con cinesargentinos es hacer una web que genere interés en leerse o buscarse. No caerle simpático a un anunciante o a un sólo lector.

Y eso hoy ya quedó claro, por suerte.

Medio año después de todo ese quilombo, quedamos embarazados de nuevo. Estuvimos mucho tiempo buscando. Trabas mentales y físicas no lo permitieron antes.

Ya mudados a metros de Parque Rivadavia y también con oficinas separadas para poder trabajar mejor. Pero cerca de casa, donde voy con mi perra a diario a hacer las tareas varias.

Sophie nació en marzo del 2012.

Tres días después de su nacimiento la tuvimos que internar en terapia intensiva de neonatología de emergencia.

Fue el peor día de mi vida. Lo que tanto había costado lograr se nos estaba yendo de las manos. A los cuatro días de la internación se calmó todo. Con miedo y golpeados seguimos con la vida. Ya nos habíamos asustado en el embarazo por pérdidas.

Con los meses nos olvidamos, aquella bebé en incubadora y con cables pasaba a ser una chancha alegre.

Mi cabeza hizo varios clicks en los últimos años, mucho por lo acá mencionado.

Me inventé un laburo.. Cuesta definir lo que hago, aunque Amélie cuenta en su colegio “mi papá mira películas y viaja”.

Cuando me enfoqué en hacer lo que más disfruto me fue mejor. Es algo que me tengo que convencer de seguir haciendo “divertirme mientras laburo”

Trabajo muchas horas por día, los 7 días de la semana. Suena raro, pero hace mucho no tengo “vacaciones”. No hay día desde el 2001 que no esté conectado haciendo algo. No me quejo. Hago lo que quiero. En un semáforo me fijo en el iPhone si hay alguna consulta en el blog y la respondo.

Todos los días reviso las críticas que sube la gente a cinesargentinos y las apruebo. Sólo reviso que no estén todas en mayúsculas o no agredan al resto de los que opinan.

¿Viajo? si mucho. Es mi cable a tierra y mi tiempo full time con mis chicas. Es una forma de compensar mi vida online.

No es un slogan tonto lo de viajen la vida es corta. Yo creo que es así. Lo siento así.

No voy a estar pagando una hipoteca 30 años. Voy a querer vivir mejor 30 años.

Tengo la suerte de no tener ataduras laborales, aunque trabaje para más de 10 empresas, en la Argentina y asesore a otras de Chile, Uruguay y Paraguay. Me armé una estructura de ingresos para que si se cae uno, no me afecte demasiado.

Somos un equipo laburando en cinesargentinos y en redes sociales de muchos rubros. Soy uno de los grandes anunciantes en Facebook y armo campañas para toda Latinoamérica. Estamos llegando a los 5 millones de seguidores administrados

Pero hago este blog también para divertirme. Es un laburo, pero me divierto. Veo en el turismo un aprendizaje en internet, como hace años viví con los cines. Hay una gran similitud y me gusta meterme con esto.

Bueno, dudo si alguno llegó hasta acá. Como dije al comienzo escribí esto para yo recordar muchas cosas. Seguro mi mente fue borrando algunas intencionalmente o de casualidad y con este post no quiero que se borren otras. Pero también me di cuenta que tenía que escribir esto, porque de vez en cuando recibo consultas que me preguntan del tipo “¿pero vos que carajo hacés? o periodistas que se preguntan de que vivo!!! Bueno… espero que ahora se más fácil entender todo.

Hoy cumplo 40 años. Y quise recordar cosas de todo este tiempo.

Dicen que lo bueno de la vida arranca ahora. ¿Y que carajo te van a decir?

Gracias por leer esto.  Gracias por haber estado a muchos de ese lado siendo testigos de lo que hice en internet en los últimos 15 años.

A los que me acompañaron en la vida real, ya los podré abrazar personalmente.

Estoy sensible. Soy un viejo sensible.

Cuarenta.